La manutención de cargas a alturas elevadas implica la pérdida de visibilidad. Lo mismo se aplica a cargas anchas y altas que obstruyen la visión del conductor. Una pequeña cámara situada en una de las horquillas o en el carro portahorquillas y un monitor en el compartimiento del conductor son el complemento perfecto. También es posible montar una cámara en la parte trasera de la carretilla para disfrutar también de una vista trasera clara. Gracias al monitor, que ofrece una calidad de imagen y colores excepcionales, el conductor tiene el control total de sus operaciones, cambios de dirección y acciones.